Scroll Top

Cómo eliminar el aislamiento en el teletrabajo

El aislamiento en el trabajo en remoto

Algunos trabajadores experimentan el aislamiento en el teletrabajo cuando trabajan desde casa o en un lugar remoto.

Trabajar desde casa ofrece mucha flexibilidad y muchos otros beneficios, pero también genera sentimientos de desconexión y falta de comunidad, así como dificultades para separar la vida personal y la profesional, que degeneran en falta de motivación y baja productividad.

En este artículo, definimos qué es el aislamiento en el teletrabajo, señalamos cuáles son sus desafíos y desglosamos las mejores prácticas para combatir sus deficiencias y promover un teletrabajo sano y positivo.

Los desafíos del aislamiento en el teletrabajo

La modalidad de teletrabajo o trabajo remoto 100 % se ha convertido en una opción cada vez más popular para muchas personas que buscan flexibilidad y para muchas empresas que buscan optimizar recursos.

Aunque trabajar desde casa ofrece muchas ventajas para algunos empleados, también presenta ciertos desafíos, sobre todo para aquellos individuales que viven solos o lejos de sus compañeros de trabajo y no acaban de separar el espacio personal del profesional. Es ahí cuando suele surgir el aislamiento en el teletrabajo.

El aislamiento en el teletrabajo es el sentimiento de desconexión y aislamiento social que surge cuando los empleados no acuden a un lugar de trabajo físico.

Este tipo de aislamiento es un desafío para las empresas, ya que, afecta al estado de ánimo de los trabajadores. De hecho, uno de los mayores desafíos del trabajo en remoto es la falta de interacción social con los compañeros de trabajo. La falta de interacción con los compañeros de trabajo suele derivar en falta de confianza y afectar negativamente al bienestar emocional de los miembros del equipo.

Además, la falta de contacto regular con compañeros de trabajo limita las oportunidades de sinergia y aprendizaje unos de otros. Por otro lado, al no tener un contacto regular cara a cara se dificulta la colaboración y la coordinación entre compañeros y puede, en consecuencia, dañar la calidad y eficiencia del trabajo.

Otro desafío común del aislamiento en el teletrabajo es la dificultad para desconectar del trabajo. Con la oficina y el espacio de trabajo en casa es complicado separar el tiempo libre de las tareas laborales. De hecho, muchos estudios muestran que el teletrabajo supone más horas de trabajo, lo que puede llevar al agotamiento y estrés.

A mayores, el trabajo remoto también presenta desafíos a la hora de mantener la productividad y la motivación en el día a día. En función de la situación de cada empleado, trabajar desde casa puede ser más o menos caótico, ya que, el ambiente es más relajado y la rutina suele verse interrumpida por factores externos (por ejemplo, el cartero, obras, tareas del hogar, familiares, etc.).

Por eso, es importante que las organizaciones que brindan la opción del teletrabajo al 100% sean conscientes de los desafíos potenciales de esta modalidad, y dediquen esfuerzos para ayudar a los trabajadores en remoto a sentirse conectados y comprometidos con sus compañeros, con sus tareas y con el negocio.

Mejores prácticas para gestionar trabajadores remotos

Entonces, ¿cómo compaginar el teletrabajo sin quemar al equipo? ¿Qué medidas existen para evitar el aislamiento en el teletrabajo?

Como cualquier circunstancia, si gestionas un equipo en remoto, deberás adoptar una planificación y prácticas adaptadas al trabajo a distancia (además de empatía y comprensión). Veamos las mejores prácticas para mantener el contacto social y fomentar un ambiente de trabajo sano desde casa:

Poner límites

Antes de nada, será crucial establecer unas expectativas claras para los trabajadores en remoto, desde los objetivos de rendimiento hasta los protocolos de comunicación, pasando por los plazos de entrega. Esto permitirá que los trabajadores comprendan desde el inicio qué se espera de ellos y cómo pueden hacer bien su trabajo.

La mejor manera de poner estos límites es crear una política o guía de trabajo en remoto, en la que se describan pautas que puedan ayudar al equipo a sentirse más conectado con la empresa. Por supuesto, deberá fomentar el balance entre trabajo y vida personal. Desde la empresa, se debe alentar a los trabajadores a ponerse horas de trabajo más o menos estables, así como tiempos de descanso y desconexión. Si es posible, facilitarte los recursos necesarios para que disponga de su espacio/oficina en casa.

Comunicación constante

La comunicación constante y proactiva es fundamental en cualquier entorno laboral, pero mucho más en la modalidad a distancia.

No se trata de atosigar al equipo pidiéndole actualizaciones ni confirmando que se encuentra trabajando, sino de proporcionar actualizaciones regulares sobre cambios o novedades relacionadas con su tarea. Y, por supuesto, también es necesario establecer algún tipo de control regular para analizar el progreso y, sobre todo, resolver dudas. Al igual que con los empleados que acuden a una oficina, es importante proporcionar comentarios y reunirse. Esto puede ayudar a los trabajadores remotos a sentirse más conectados con el equipo y brindar oportunidades de mejora.

La comunicación debe ser clara, concisa y oportuna.

Brindar oportunidades y opciones para socializar

Fomentar la interacción social en equipos remotos no solo ayuda a combatir la sensación de aislamiento, sino que también puede aumentar la productividad y generar confianza. Los miembros del equipo remoto pueden sentirse más conectados entre sí y estar más al tanto de los proyectos en los que trabajan juntos, lo que puede llevar a una mayor motivación y compromiso con el trabajo.

Haced una puesta en común y dejad volar vuestra creatividad. Lo importante es ofrecer oportunidades y opciones para socializar y encontrar puntos en común (que en última instancia ayudarán a generar confianza).

¿Y si creáis grupos virtuales con intereses comunes o áreas de especialización similares para que los empleados que trabajan desde casa se sientan más conectados?

Otra buena opción puede ser vincular trabajadores con mentores u otros compañeros que ya hayan pasado por fases anteriores para aumentar la conexión con la empresa e incrementar el apoyo y orientación de carrera. Además, los mentores pueden brindar consejos, responder preguntas y ayudar a los trabajadores remotos a ahondar en sus roles y responsabilidades.

Con la tecnología actual y la variedad de herramientas disponibles para la colaboración en línea, no hay excusas para no fomentar la interacción social de equipos en remoto. Existen gran cantidad de herramientas que facilitan la colaboración y la interacción social en tiempo real a través de la distancia.

Conclusión

Aunque el trabajo remoto ofrece muchas ventajas, también presenta desafíos relacionados con el aislamiento social. De este modo, la falta de interacción con los compañeros de trabajo puede causar impactos negativos en el bienestar emocional de las personas, limitar las oportunidades de sinergia y aprendizaje y afectar a la calidad y eficiencia de su trabajo.

Tanto empleados como empresas deben reconocer los desafíos del trabajo en remoto y fomentar la creación de ambientes de trabajo a distancia que promuevan la salud mental y física. Por el bien de ambas partes.

Política de privacidad